Es cuestión de querer, entretener al corazón
que trabaje sanamente, permitirle que ame
que corra con el ritmo de alma ligera al viento
que baile su latir
que actúe como el parpadeo de ojos melancólicos
a veces quedito por hacer interminable el instante.
Dejarse querer debe ser lo más sublime
tierno, caprichoso y entretenido de la vida
nuestros sentidos se involucran con alegría
sincronizándose para crear de cada encuentro un sinfín de maravillas.
Dejarse querer es tener la paciencia despierta y ansiosa
por llegar cerca de quien genera temblor en la piel
quien logra quitar todo orgullo ante su boca
borra lo sucedido del pasado y procura un presente de pasión.
Querer es llorar de emoción ante la alegría del que se ama
el que vive resguardado en los ojos y en el espejo, a tu lado mirándote
es a quien se busca entre la gente y se reconoce.
Déjate querer, así se vive mejor
siente una caricia, un beso cálido, un abrazo lleno de aprecio
absorbe la buena voluntad.
Déjate querer y quiere a quien te quiere
compartan locuras, reencuéntrense en sueños
jueguen a ser habitantes de lejanos lugares.
Déjate querer para conocer la verdad de quien te responde
déjate querer y camina junto con su sombra, con su sol, su luna
contágiate de su calma por estar contigo
déjate querer por todos
deja que te quiera
quiéreme…
